NICANOR PARRA, PREMIO BICENTENARIO / ESPECIAL NICANOR PARRA ARCHIVO NUESTRO

Mayo 2001
Nicanor parra recibe el Premio Bicentenario 2001:

Un profeta en su tierra

Desde el 28 de mayo podremos decir con justa razón que hay profetas en nuestra tierra y que se hace el reconocimiento merecido al único chileno que desde diversos ámbitos es postulado al Premio Nobel: Nicanor Parra. El Premio Bicentenario otorgado por la Corporación del Patrimonio Cultural de Chile en conjunto con la Universidad de Chile, este año recayó sobre nuestro antipoeta. La distinción, consistente en una escultura conmemorativa del Puente de Cal y Canto, reconoce la trayectoria de una personalidad que a través de su labor cultural y de servicio público, haya marcado una diferencia en el país.
Ya está todo listo para la entrega del Premio Bicentario 2001, que se llevará a cabo el 28 de este mes en la Casa Central de la Universidad de Chile. En su taller, el escultor Juan Sebastián Solar, da los últimos retoques a la hermosa escultura en bronce del Puente de Cal y Canto que irá a parar a manos de Nicanor Parra.
Por segundo año consecutivo, la Corporación del Patrimonio Cultural de Chile, en conjunto con la Universidad de Chile, entregan este galardón que se proyecta con carácter anual hasta el 2010, año del Bicentenario de la República, y que constituye un reconocimiento a la trayectoria de una persona que, en palabras de sus gestores, “haya marcado una diferencia en el país, a través de un legado que represente ampliamente el espíritu republicano”. Al cabo de una década, el listado de los premiados, bien podría conformar una significativa selección de diez personajes claves de nuestra sociedad durante la segunda mitad del siglo XX. El año pasado fue favorecido el empresario Eugenio Heiremans, por su importante contribución a la seguridad y salud de los trabajadores, a través de la Asociación Chilena de Seguridad (Achs) y el Hospital del Trabajador, además de su apoyo al teatro, a la música, a proyectos patrimoniales y al arte, con la adquisición de diversas obras de artistas chilenos colocadas en las oficinas de la Achs y en sus centros hospitalarios.

La amplitud del alcance de la obra y pensamiento, su impacto en la cultura y la calidad de vida de los chilenos, así como el espíritu de servicio, y la labor patrimonial, son aspectos considerados en la decisión del jurado, compuesto por miembros de las dos instituciones convocantes, además del galardonado del año anterior, y el Presidente de la Comisión Patrimonial del Bicentenario, conformada al alero de la Corporación del Patrimonio Cultural de Chile. Este año, el pronunciamiento fue unánime en favor de nuestro antipoeta, cuya obra, de repercusión y valor universal, representa la creación de un género literario original y propio, que se alimenta de nuestra cultura popular y desde ella aporta una nueva forma de mirar la realidad, en base al humor y el espíritu lúdico que oxigenan y revitalizan el quehacer intelectual. La significación de esta obra para varias generaciones de chilenos, la proyección internacional de nuestra identidad, que ella implica, la influencia de Parra en la vida nacional como intelectual y su labor como profesor universitario, son factores que determinan este reconocimiento a uno de nuestros Premios Nacionales de Literatura, que bien podría hacerse acreedor del Premio Nobel, como muchos lo afirman.

En esta ocasión, la Comisión Bicentenario de la Presidencia, se hará presente con la entrega de un premio en dinero para el galardonado. Al acto se espera, al igual que en su versión anterior, la asistencia de una gran cantidad de personalidades del ámbito político, empresarial y cultural.