EXPOSICIÓN CHILE MESTIZO

Marzo 2009
Imágenes de culto
Hermosas pinturas y tallas coloniales; joyas y objetos litúrgicos de la época; artesanías; imaginería local; santos, cristos y vírgenes de culto activo, de distintas localidades de Chile, conforman la muestra Chile Mestizo: tesoros coloniales, que se presenta a partir del 13 de marzo en el Centro Cultural Palacio La Moneda. Un verdadero tesoro disperso en iglesias y museos a lo largo de nuestro territorio que, reunido en este espacio de exhibición, nos permite apreciar uno de los legados más valiosos que poseemos, tanto desde el punto de vista artístico como patrimonial: aquél de las imágenes históricamente devocionadas por nuestro pueblo, en el espacio público y privado, que identifican profundamente a cada una de las comunidades y que encarnan el ensamblaje de la evangelización católica con la tradición originaria de América, en lo que constituye el germen de nuestra cultura “mestiza”.

La exposición, curada por la historiadora del arte Gloria Cortés, se complementa con documentales de Claudio Mercado y Francisco Gedda, entre otros. Como contrapunto, se presenta en la Galería de la Fotografía, del mismo Centro Cultural, una muestra de arte contemporáneo, titulada Devota, la cual, bajo la curatoría del investigador Sebastián Vidal, ofrece una lectura actual a esta iconografía y sus simbolismos, con obras de Hugo Marín, Bruna Truffa, Mauricio Garrido, Demian Schopf y Marcela Duharte.

Por Rosario Mena

 

Consultados por un periodista de televisión, los habitantes de Los Andes, que cada día devocionan la imagen de San Sebastián, que guarda la parroquia de Santa Rosa, manifestaron sentirse orgullosos de que su santo se hiciera conocido en la capital, pero sobre todo, muy preocupados de que, efectivamente regresara a casa sano y salvo. La figura, en tamaño natural, representante por excelencia del barroco, fue realizada en Chile en el siglo XVIII por el escultor jesuita germano Juan Bitterich y es considerada una de las obras escultóricas más importantes de la historia del país. Pero eso no es lo importante para sus fieles devotos, que al igual que otros, desde Arica hasta Chiloé, han prestado sus vírgenes, cristos y santos locales para ser exhibidos en la muestra Chile Mestizo: Tesoros Coloniales, que se presenta entre marzo y junio de 2009 en el Centro Cultural Palacio La Moneda, con el auspicio de Minera Doña Inés de Collahuasi y la colaboración de la Fuerza Aérea de Chile en el traslado de las piezas.

San Miguel Arcángel, de la zona central; así como las vírgenes del Carmen, del Rosario y de La Candelaria, el Crucificado Chilote o el San Antonio de Padua, que vienen desde el archipiélago, salen de sus templos para sumarse a esta exhibición. De la basílica de Andacollo, en la cuarta región, llega la Virgen del Rosario, que convoca a multitudes en su tradicional celebración, y que es sacada en procesión cada primer domingo del mes. Todos representantes de una producción local que, durante la época de la Colonia, llevó a cabo una apropiación criolla del imaginario evangelizador, combinándose con el legado de las órdenes religiosas y las obras importadas de las llamadas escuelas americanas, productoras de arte religioso, especialmente tallas de Quito y pinturas del Cuzco.

Otro tanto ocurre con el conjunto escultórico La Última Cena, procedente de Matilla, al interior de Iquique, que, obra de un anónimo peruano del siglo XIX, representa en tamaño natural a Jesús y los doce apóstoles. Su salida, deja un enorme vacío en el templo de esta pequeña comunidad, esperanzada de que en Santiago, los visitantes sean capaces de apreciar el enorme valor de estas figuras. Lo mismo puede decirse de todas las iglesias, museos y conventos que han facilitado lo más preciado que poseen para conformar este verdadero viaje hacia los orígenes de nuestra identidad: el Museo Histórico Domínico y Museo de Artes Decorativas de Recoleta; el Museo del Carmen de Maipú; el Museo Histórico Nacional; el Museo Regional de Ancud; el Museo O´Higginiano y de Bellas Artes de Talca; el Museo de Arte y Artesanías de Linares; el Museo de la Merced; el Museo Regional de Rancagua; la Biblioteca Patrimonial Recoleta Domínica; la iglesia Santa Rosa de Los Andes; la Basílica de Andacollo; el Museo Colonial de San Francisco; el Museo Nacional de Bellas Artes; el Arzobispado de Ancud; el Museo del Buen Pastor, del convento de San Felipe; la Iglesia de San Vicente Ferrer; el templo de Santo Domingo; el Museo de Curimón y el Convento del Carmen Alto de San José, entre otros.

De este convento, ubicado en la comuna de Ñuñoa, en Santiago, proviene el Cristo de Mayo. Se trata de una de las pocas pinturas realizadas en Chile en el siglo XVII, de autor anónimo, que representa a este Cristo cuya figura, desde 1647 es protagonista de una tradicional procesión por el centro de Santiago. Forman también parte de la muestra importantes obras como los óleos de Mulato Gil de Castro, que representan a la Virgen de la Merced y a Santo Domingo, provenientes del Museo de Bellas Artes y del Museo Colonial de San Francisco. El pintor peruano, radicado en Santiago a partir de 1808, dejó testimonio, a través de sus retratos, de importantes figuras de nuestra historia, especialmente en el período de la Independencia. Entre ellos, Bernardo O´Higgins, a quien inmortalizó en un cuadro que se transformaría en la imagen oficial del “padre de la patria”.

Se exhiben, además, dos obras pertenecientes a la serie Vida de San Francisco, de Juan Zapaca Inga, realizadas en 1684, y la pintura “Virgen con el Niño entre San Francisco y Santa Clara”, la más antigua producida en el Virreinato del Perú que se conserva en Chile, realizada en 1602 por Angelino Medoro, italiano pionero de las escuelas americanas.
El prestigioso arte religioso cuzqueño y quiteño, no sólo llega a Chile a través de la importación de piezas, sino también de artesanos que se instalaron en nuestro país. Es el caso de la familia Palacios, de pintores y escultores provenientes de Ecuador, quienes poseían en Santiago uno de los talleres más solicitados durante la primera mitad del siglo XIX. Antonio Palacios y sus hijos Manuel Palacios Daqui y Pedro Pablo Palacios Rodríguez llegaron en el año 1826. Formados en el taller de los hermanos Cabrera, en Quito, participaron en la creación de importantes obras firmadas por éstos, y que están presentes en la muestra, tales como “Las postrimerías”, proveniente de la Iglesia de San Vicente Ferrer; o la serie de pinturas “Santos Dominicos”, de la iglesia Recoleta Dominica, además del cuadro “Nuestra Señora del Rosario”, proveniente del Templo de Santo Domingo y dentro del cual se puede apreciar la figura del prior del convento de Santo Domingo; del Presidente de la República, José Joaquín Prieto, y del propio Antonio Palacios.

La exposición incluye pinturas, imaginería religiosa; mobiliarios, fanales y altares domésticos; cantorales, partituras musicales, documentos y objetos litúrgicos; platería y arte textil, entre otras piezas. De gran atractivo es la recreación, gracias a un proyecto de la Fundación Altiplano, de un retablo de más de cuatro metros cuadrados, antiguamente existente en la Iglesia de San Miguel de Azapa y obra de un tallador ecuatoriano, así como la custodia de plata con perlas y cristales proveniente del Museo del Buen Pastor, del Convento de San Felipe.

La museografía se complementa con documentales, relatos y crónicas; que contextualizan el momento histórico y la proyección de estas expresiones culturales a través del tiempo. Se conforma así un complejo visual relacionado con la devoción y la organización social, donde se sintetizan elementos españoles, criollos e indígenas en el desarrollo de una identidad propia en torno a la fe y las devociones populares que perviven hasta nuestros días. Este mestizaje se aprecia tanto en el espacio público, a través de fiestas, procesiones, misas, liturgias y circulación de estampas religiosas, como en el espacio privado de casas y conventos.

Lectura contemporánea

Hugo Marín, Mauricio Garrido, Bruna Truffa, Demian Schopf y Marcela Duarte son los artistas contemporáneos que componen la muestra DEVOTA, que se presenta a partir del 21 de marzo. La exposición, complementaria a Chile Mestizo, constituye una lectura actual del arte barroco, recogiendo no sólo su iconografía religiosa, sino también revelando la carga simbólica de las imágenes devocionales. Se exhibe pintura, escultura, instalación y fotomontaje.

Patrimonio Vivo

Cuatro documentales serán presentados en plasmas en el hall central del Centro Cultural. Cantando me amaneciera. Un documental sobre los guitarrones de Pirque, de
Claudio Mercado y Gerardo Silva; La Tirana, dolor y esperanza, producido por Francisco Gedda, con guión y dirección de Oscar Garaycochea; Las misiones en Chiloé, de Francisco Gedda y Penitentes, de Patricio González.

Galería de imágenes
Jesús Crucificado. Chiloé.
Jesús Crucificado. Chiloé.
Cristo de Mayo. Anónimo, Chile, siglo XVII.
Cristo de Mayo. Anónimo, Chile, siglo XVII.
San Antonio de Padua. Anónimo, Chiloé, siglo XVIII.
San Antonio de Padua. Anónimo, Chiloé, siglo XVIII.
Virgen del Carmen. Museo Histórico Dominico.
Virgen del Carmen. Museo Histórico Dominico.
Virgen de la Merced con San Pedro Nolasco y San Ramón Nonato (también llamada La Pasiflora).
Virgen de la Merced con San Pedro Nolasco y San Ramón Nonato (también llamada La Pasiflora).
Las Postrimerías. Hermanos Cabrera. Óleo sobre Tela. Quiteño.
Las Postrimerías. Hermanos Cabrera. Óleo sobre Tela. Quiteño.
San Sebastián. Atribuido a Juan Bitterich, Chile,
San Sebastián. Atribuido a Juan Bitterich, Chile,
San José con el Niño. Anónimo, Quito (Ecuador)
San José con el Niño. Anónimo, Quito (Ecuador)
San José y el niño Jesus.
San José y el niño Jesus.
La última cena. Anónimo, Perú, siglo XIX. Conjunto escultórico Madera tallada y policromada. Iglesia de Matilla.
La última cena. Anónimo, Perú, siglo XIX. Conjunto escultórico Madera tallada y policromada. Iglesia de Matilla.
Virgen de La Merced. José Gil de Castro, 1817-1819. Óleo sobre tela Colección Museo de Arte Colonial de San Francisco.
Virgen de La Merced. José Gil de Castro, 1817-1819. Óleo sobre tela Colección Museo de Arte Colonial de San Francisco.
Nuestra Señora del Rosario de Andacollo. Hermanos González Lizardi. Madera tallada y policromada.
Nuestra Señora del Rosario de Andacollo. Hermanos González Lizardi. Madera tallada y policromada.
Virgen de la Purísima. Anónimo, Chiloé, siglo XVIII. Madera tallada y policromada. Iglesia de Quinchao, Comuna de Quinchao,  Chiloé, Región de Los Lagos.
Virgen de la Purísima. Anónimo, Chiloé, siglo XVIII. Madera tallada y policromada. Iglesia de Quinchao, Comuna de Quinchao, Chiloé, Región de Los Lagos.